Hoy empieza febrero y parece que fue el otro día cuando hicimos nuestros propósitos de año nuevo. Si uno de ellos fue emprender con tu negocio para hacer valer tu voz en este mundo y desplegar todos tus talentos, hoy te interesa lo que te vengo a contar.
Después de casi tres años entrando paulatinamente en mi propio negocio, hasta entrar de lleno hace más de seis meses, he podido observar las cosas que molan de ser tu propia jefa y las que son bastante tediosas.

Antes de emprender, como muchas veces he dicho, es necesario alinearte con tu mensaje, conocer muy a fondo tu propósito y a partir de ahí pivotar para ofrecer servicios y productos que estén sincronizados con tu público. Si ya has dado este paso, entonces ya estás en el camino. Si no, sabes de sobra que es mi especialidad y me encantará tener un face to face contigo para ayudarte a sacarlo de una vez por todas. Las técnicas de programación neurolingüística, el coaching y la meditación de thetahealing ® son herramientas super poderosas para dar con tu flow. Si te apetece que tengamos una sesión juntas y poder planificar tu ascenso creativo puedes escribirme aquí.

Y volviendo al hilo, cuando entras en tu flow y empiezas a andar tu camino, no es oro todo lo que reluce. Hay muchas ventajas pero también existen unos cuantos inconvenientes que a veces te sacan de quicio. Vamos a ir desgranándolos uno por uno.

Lo más top de ir por tu cuenta y no tener al jefe comiéndote la oreja día sí y día también

1-LIBRE COMO EL SOL CUANDO AMANECE, YO SOY LIBREEEEE!

Mi preferida, mi amada y mi bien querida libertad. Experimentas la libertad total. La libertad de horarios. Tú te lo guisas y tú te lo comes a la hora que te apetece y cuando te lo pide el cuerpo. No hay acto más democrático que este. Además, fuera rutinas, los horarios te los pones tú y no tienes que constreñirte a una estructura temporal que no va contigo ni por asomo. Vamos que dejas de mirar el reloj porque te importa un pimiento qué hora sea. El tiempo deja de pasar lento y empieza a pasar ¡VOLANDO!. Y como consecuencia, a veces te faltan horas. De eso hablaremos más adelante.
Y si de libertades totales hablamos, también está, como no, la libertad creativa. Ésta es impagable. Aquí puedes permitirte jugar a cada momento, experimentar a tu gusto pero eso sí, siendo rigurosa y probando muy bien lo que haces. No todo vale. Pero dentro de esa rigurosidad de entregarte a tus clientes, sientes que hay un espacio para ti donde se te pide que seas tú y aportes los ingredientes que te hacen única. De hecho, te contratan por eso. Ahí está el truco. Si sigues tu instinto creativo y lo filtras por el tamiz de la rigurosidad y la honestidad, te aseguro que tu servicio es de los más TOP del mercado.

2- LA RESPONSABILIDAD ES SOLO TUYA

No hay acto más bello y más honesto con una misma que hacerse responsable de tus actos. Lo descubrí años antes de empezar con mi proyecto, cuando tenía 19 años y hacía un programa de radio sobre cine y filosofía en la emisora de mi pueblo. Allí me di cuenta que las palabras tenían repercusiones. Pero al emprender, y ver el aterrizaje directo de las ideas en las personas, hizo que me pusiera las pilas para continuar ejerciendo esta virtud. Aquí no hay a quien señalar con el dedo acusador. No puedes echarle el muerto al de al lado. Tanto si la clavas como si la cagas, ten por seguro que tú eres la artífice del resultado. Esto te otorga un superpoder, el de ser consciente de tus pensamientos y de tus actos, pero como todo superpoder, conlleva una gran responsabilidad y eres tú la que ha de cuidar cada día lo que piensas, cómo lo piensas y de qué mejor manera lo llevas a la práctica. La excelencia está servida.

3-TRABAJAS CON QUIEN TE DA LA REAL GANA

No estás obligada a nada, tú eliges con quien trabajas. Si un cliente te pone de los nervios porque no se ajusta a tus reglas, piensa una cosa detenidamente: ¿le has marcado tu forma de trabajar desde el principio?; ¿has dejado claro lo que entra en tu competencia y lo que no? Cuando rebajamos las expectativas, nos responsabilizamos de lo que llevamos a cabo, delimitando nuestro marco de actuación y dejamos también la responsabilidad al cliente, sobre todo en procesos de coaching, todo va sobre ruedas. Y recuerda, si sigues ahí con él, será porque todavía no has aprendido qué tipo de personas quieres en tu negocio.

Lo menos molón de ir por tu cuenta y tirar tú sola del carro.

1-AGENDAR TAREAS COMO UNA LOCA SIN DEJAR HUECOS PARA EL DISFRUTE

Al principio estás entusiasmada. Estarías currando todos los días. Te flipa, te hace sentir viva y tienes una ilusión que te da la vida. Quieres sacarlo por todos los lados, unas horas aquí y otras allá. Perfecto. Pero luego te viene el agobio. Saber planificar, priorizar y espaciar las tareas es todo un arte. Yo todavía estoy aprendiendo, pero muchas emprendedoras demandan este servicio, sobre todo cuando su negocio empieza a crecer y una de dos, o se clonan o contratan a alguien. Antes de desbordarte de curro, sé inteligente y prioriza. Y el mantra que a mí me ayuda es: “no soy una mula de carga, he venido a disfrutar” 🙂

2- EL PAPELEO Y LAS MATEMÁTICAS

Un locura y un desastre. Calcular el IVA, rendir cuentas a Hacienda, llevar la numeración correcta de las facturas. Monitorizar si tus clientes te han pagado o no. Hacer el seguimiento de las facturas. Es agotador y aburrido. Mi flow no está en la gestión, lo tengo claro. Por eso, prefiero delegar y pagar para que me lo hagan. FIN.

3- ¿CÓMO TE HABLAS CUANDO FALLAS?

Vuelvo al tema del diálogo interno que sabes que es recurrente en mí. Cuando empecé más en serio a meditar fui consciente de cómo me hablaba a mí misma, de qué mensajes me lanzaba cada día y de cómo me trataba en definitiva. Ahora dedico cerca de diez minutos por la mañana y diez por la noche a entrar en mi interior y tener una charla conmigo misma sobre los asuntos que me importan del día. Si en algún momento he sentido que no he dado todo de mí o que he fallado en algún momento, hago un poco de hoponopono y unas meditaciones de Un Curso de Milagros.

Muy pronto te contaré qué es este curso y qué es lo que ha significado para mí en mi trayectoria personal y profesional.

Seguro que te has sentido identificada en alguno de estos puntos y me encantará saber cómo has dado el paso para seguir adelante.

Te mando un super abrazo