La agilidad mental se transfiere a la velocidad y el ritmo de la voz. Esta es una voz inquieta, dicharachera, amigable y sincera. De hecho su honestidad brota a raudales, juraría que se quitó la mordaza de niña buena y empezó a largar verdades como templos, de ahí que sus seguidorsas la adoren, por esa radicalidad en su sinceridad. Su timbre es agudo y danzarín, algo tajante y directo, fresco como una bocanada de aire puro en mitad del desierto. Necesario, contundente y embriagador. Me encantan este tipo de voces, siempre ejercen sobre mí esa inquietante melodía que te invita a reflexionar, a tener ojo crítico y sobre todo a desarrollar tu propia voz.

Cuando la escucho me quedo sumamente quieta, atenta y con el foco puesto en entender bien el mensaje. Casi en estado de alerta, empapándome de cada matiz, de cada palabra y de cada aliento.

Con todas vosotras, la coach Ana Albiol.

Dale al play y disfruta.mito